Los beneficios del Tahayyud

Alhamdulillah, Quien nos ha otorgado Su Gracia y nos concedió Sus bendiciones y bondades. Doy testimonio de que no hay más dios que Allah, Único sin asociados, y que Muhammad ﷺ es Su siervo y mensajero que rezaba de noche ante su Señor hasta que sus pies se hincharon, en gratitud a su Creador, y Paz y bendiciones sobre su familia y sus compañeros.

¡Ayunantes! Tened taqwah de Allah, y sabed que estáis en un mes que Allah ha honrado con el ayuno y el rezo por la noche; cumplid adecuadamente con ambos, y seréis de los vencedores en este mundo y en el ajira. Al Bujari narró en su Sahih del hadiz de Abu Hurairah, que Allah esté complacido con él, que el Mensajero de Allah ﷺ dijo: «Nuestro Señor, Alabado y Ensalzado sea, desciende cada noche hasta el cielo más bajo en el último tercio de la noche y dice: ‘¿Quién me implora y responderé a sus ruegos? ¿Quién me pide y le daré lo que pedía? ¿Quién suplica mi perdón y lo perdonaré?’». En otra narración: «¿Hay alguien que me pida perdón, para que yo pueda perdonarlo?». En otra narración: «¿Hay alguien buscando provisión de Mí para que pueda proveer para él? ¿Hay alguien que sufre para aliviar su sufrimiento?». Y así hasta el amanecer.

Este es el llamado del Rey, el Juez, ¡siervos de Allah! ¿Hay alguien entre nosotros que responda a este llamado, o nuestros corazones están desatentos y distraídos? En este hadiz, Allah, Alabado sea, demuestra a Sus siervos que Él ama que ellos estén ante Él en el último tercio de la noche. Porque es el mejor momento para la quietud del corazón. Allah Todopoderoso dijo: «Y en el seno de la noche hay mayor quietud y es más certera la dicción». (Sura del Envuelto en el manto, Al Muzzamil, 6) Es decir, produce más efecto en el corazón y son más ciertas y claras las palabras porque el corazón está vacío de las cosas de Dunia (este mundo) Así pues, ¡ayunante!, acude a esta cita con tu Señor y pide lo que quieras ante el Compasivo en la oscuridad de la noche, y llora por tus faltas y errores y póstrate ante el Misericordioso, pues en tu postración estás lo más cerca de tu Creador, y El que te da provisión. Allah Todopoderoso dice: «Póstrate y busca proximidad». El Profeta ﷺ dijo: «Lo más cerca que el siervo está de su Señor es cuando está en suyud (postración). Así que haced muchos du’as durante el mismo».

Sabed que la súplica del ayunante es aceptada y respondida, especialmente en plena noche. El Profeta ﷺ dijo: «Hay tres cuyas súplicas no serán rechazadas: el gobernante justo, el ayunante hasta que rompa su ayuno, y la súplica de quien ha sido tratado injustamente». Los eruditos dijeron que la súplica del ayunante es aceptada antes, durante y después de romper el ayuno.

Asimismo, en el Corán hay evidencia de incitar a aquellos que están ayunando a hacer du’as, y aparece justo en medio de las aleyas sobre el ayuno. Allah Alabado sea dice: «Y cuando Mis siervos te pregunten sobre Mí… Yo estoy cerca y respondo al ruego del que pide, cuando Me pide; así pues, que ellos Me respondan y crean en Mí, ¡Ojalá se guíen rectamente!». (Sura de la Vaca, Al Baqarah, 186)

¡Ayunante!, no duermas toda la noche y pierdas la oportunidad de alcanzar el encuentro con Allah en lo más profundo de la noche, y no hagas que tu ayuno carezca de qiyam. ¿Acaso no tenemos faltas, graves errores y defectos evidentes?

El Profeta ﷺ dijo: «En el Paraíso hay moradas cuyo exterior puede ser visto desde el interior y cuyo interior puede ser visto desde el exterior. Allah las ha preparado para quienes alimentan a los pobres y rezan por la noche mientras la gente duerme». Y entre los atributos de los siervos del Rahman: «Y los que pasan la noche postrados y en pie, por su Señor» (Sura del Discernimiento, Al Furqan,64) Y entre las características de los justos de la gente del jardín: «Dormían poco por la noche y en las horas previas al amanecer pedían perdón». También dijo en la Sura Al Imran, explicando las características de los justos: «Los pacientes, los veraces, los que se entregan a la obediencia, los que dan, y los que piden perdón en el tiempo anterior al alba»

¡Ayunante!, no estés entre aquellos que quedan privados de la recompensa de la oración nocturna, especialmente en los últimos diez días de Ramadán, que se están acercando, son días especiales para hacer tahayyud, recitar el Corán, hacer du’as, hacer dhikr y ser reverente.

Y nadie sabe si los viviremos nuevamente o si la muerte se interpondrá entre nosotros y estos momentos y actos bendecidos.

Allah Todopoderoso dice: «Establece el salat desde que el sol comienza a declinar hasta la llegada de la oscuridad de la noche, así como la recitación del alba. Es cierto que la recitación del alba queda atestiguada. Y vela parte de la noche como un acto voluntario para ti, puede que tu Señor te eleve a una estación digna de alabanza».

¡Ayunante!, aprovecha el tiempo en el que estás libre antes de que estés ocupado, y sé de los que llenan las casas de Allah y de los huéspedes del Rahman, las filas de la mezquita están vacías, especialmente durante los días de tahayyud. Y recuerda que dormir demasiado conduce a la debilidad, la pereza, la humillación, la degradación y el letargo.

Se ha dicho: «Oh tú que duermes y estás desatento, la esperanza te ha engañado, ¿hasta cuándo estarás preocupado por tu sueño por la noche?».

Allahumah, facilítanos el rezo por la noche y el ayuno. Líbranos de la debilidad y la pereza. Haznos estar entre quienes buscan el perdón en el último tercio de la noche. Amin.