Alhamdulilah, Quien unió los corazones de sus siervos creyentes y los hizo como un solo cuerpo a lo largo de los años y de los siglos. Unió sus corazones con afecto y una cuerda fuerte. Doy testimonio de que no hay más dios que Allah, Al Malik, Al Haqq, Al Mubin.
Y que Muhammad es Su siervo y Mensajero, el sello de los profetas y mensajeros. Y paz y bendiciones sobre su familia, sus esposas, y sus compañeros hasta el Día del Juicio.
Musulmanes, tened taqwah de Allah, y aferraos todos juntos a la cuerda de Allah y no os dividáis.
Allah Todopoderoso dijo: «Y no seáis como aquellos que se dividieron y discreparon después de que les llegaron pruebas claras, esos tendrán un gran castigo». Y dijo el Profeta ﷺ: «El ejemplo de los creyentes en su mutuo amor, compasión y simpatía es como un solo cuerpo. Si un miembro se queja, el resto del cuerpo responde con noches de insomnio y fiebre».
Sabed que Allah, alabado Sea, nos ordenó en Su Libro que nos uniéramos y nos prohibió la división. La fuerza está en la unión, pero la división da como consecuencias debilidad, derrota y extinción. El Profeta ﷺ comparó la unión de los creyentes con una estructura sólida, y en una estructura así, se pueden ver piedras de diferentes tamaños, unas grandes y otras pequeñas, pero la edificación es sólida a través de la cohesión y la cooperación. En otro hadiz, lo comparó con un solo cuerpo: si un órgano se queja, todo el cuerpo permanece despierto debido a la enfermedad de un órgano. La analogía que usó el Profeta ﷺ es elocuente: Comparó la sociedad con un solo cuerpo. No hay bien en un grupo en el que no hay ayuda mutua. Este fue el método de nuestro Profeta ﷺ en Meca y Medina.
En los comienzos del Islam, los compañeros del Mensajero ﷺ solían reunirse en la casa de Al-Arqam bin Abi Al-Arqam. A pesar de que eran pocos, y gracias a su encuentro y a la cooperación entre ellos, empezaron a aumentar grandemente en número día tras día, por la unión y el liderazgo y el rechazo al desacuerdo y la controversia. Cuando el Profeta ﷺ emigró a Medina, lo primero que hizo fue establecer la Hermandad entre los inmigrantes y los Ansar. Los inmigrantes se fundieron con los Ansar y viceversa, y se convirtieron en una nación con un solo objetivo y detrás de un solo imam.
Siervos de Allah, debemos aferrarnos a la sunna de nuestro Profeta ﷺ y seguir el ejemplo de sus compañeros adhiriéndonos al vínculo de la comunidad, al afecto y a la ayuda mutua. El Profeta ﷺ advirtió contra la división y dijo: «Quien se niega a obedecer y se separa del grupo y muere, muere en estado de yahiliya (ignorancia)» Narrado por Muslim. Nuestro din nos ha hecho anhelar todo lo que fortalece los lazos de la comunidad, como mantener los lazos de parentesco, intercambiar visitas y dar de comer a la gente, que es algo que no vemos sino en el mes de Ramadán. El objetivo de dar de comer no es solo comer, la finalidad es encontrarse, tratar algunos asuntos, recordar a Allah, consultar y aconsejarse mutuamente, y verse. ¿Acaso no sabéis que mirar el rostro de tu hermano es sadaqah, una buena palabra es sadaqah, y una sonrisa es sadaqah?
Asimismo, Allah, alabado sea, ordenó a los musulmanes que se reunieran en su casa cinco veces al día, que son las cinco oraciones diarias, y les ordenó una reunión más grande una vez por semana, que es el Yumu’ah, y les ordenó una reunión que la supera, dos veces al año, que son el Eid al-fitr y el Eid al-Adha. De igual modo les ordenó celebrar una gran y solemne reunión una vez al año, que es el día más importante del Hayy (el día de Arafah). Todo ello es para que perdure el encuentro, la unión y los vínculos familiares. Dar comida no es una cultura específica ni la cultura de un país, sino que es la Sunna del Amado ﷺ y la Sunna de Allah en Su creación, Quien dijo: «Y daban de comer, a pesar de su propia necesidad y apego a ello, al pobre, al huérfano y al cautivo. No os alimentamos sino por la faz de Allah, no buscamos en vosotros recompensa ni agradecimiento».
Lo que fortalece a los grupos es la comunicación entre ellos, el intercambio de actividades, conferencias e intercambio de visitas. Hay varias comunidades en la ciudad de Granada, pero la comunicación entre ellas es escasa o inexistente. Cada responsable o emir debe renovar la conexión entre su comunidad y el resto de las comunidades, y este es un papel del emir: instar a su comunidad a interactuar con otras comunidades. Asimismo, el emir o el responsable necesita el consejo de la gente de conocimiento y opinión, y necesita vuestras sugerencias. Acaso no dijo sayyiduna Umar: «Quien entre vosotros vea en mí algo torcido, que lo enderece. Es decir, quién vea que he cometido un error o desvío que me corrija porque un líder recto puede rectificar». Así que el creyente es el espejo de su hermano creyente.
Si hay orden, regularidad e intercambio de opiniones entre los grupos, será fácil para el visitante y para el que se acerca a conocer, comprender la meta y el propósito de la comunidad e integrarse en ella. Y a través de este orden, seremos un ejemplo a seguir para los otros, y lograremos competir en buenas acciones, y otros seguirán nuestro ejemplo. Y dice Allah, Alabado sea: «y en eso que compitan los competidores».
Por medio de los encuentros, las mentes interactúan entre sí y crecen en conocimiento, sin embargo, por el aislamiento y los conflictos se desactivan. Allah, Todopoderoso, dijo: «Los creyentes son, en realidad, hermanos; reconciliad pues a vuestros hermanos». Pero la rectitud viene antes que la reforma y el corregir. Corregirte a ti mismo, a tus hijos y a aquellos bajo tu autoridad antes de corregir a los demás.
Allahummah, une nuestra palabra y nuestras filas, y guíanos. Allahummah, bendícenos el mes de Sha’ban y permítenos llegar a Ramadán, y haznos estar entre los que dicen y actúan inmediatamente, y protege a nuestra comunidad de la división y la dispersión, y que su palabra sea la más elevada. Allahummah delega nuestros asuntos a los mejores de entre nosotros y muéstranos la verdad como verdad, y concédenos la capacidad de seguirla; y la falsedad como falsedad, y concédenos la capacidad de evitarla.
Allahummah, concede la victoria a nuestros hermanos asediados, sostenlos y ten piedad de sus mártires. Allahummah, derrota a los agresores que han transgredido y causado estragos en la tierra, y concede la victoria a los oprimidos dondequiera que estén. Amin.