El mérito de la noche del nacimiento del Mustafá

Las alabanzas pertenecen a Allah, Quien nos hizo de la nación del señor de los mensajeros, nos eligió para Su mensaje, nos sacó gracias a su profecía de la oscuridad a la luz y quitó el velo sobre ojos ciegos, corazones y oídos sordos.

Creyentes, se nos acercan días llenos de bendición que nos acercan los recuerdos más preciosos de la ummah del islam. Son días de Allah. Dijo alabado sea: “y recuérdales los días de Allah”. Si esta conmemoración no es de los días de Allah, entonces, ¿qué son los días de Allah? Dice Allah, alabado sea: “En verdad que os ha llegado un Mensajero salido de vosotros mismos; es penoso para él que sufráis algún mal, está empeñado en vosotros y con los creyentes es benévolo y compasivo”. En esta aleya, Allah, alabado sea, nos anunciaba la venida del Mensajero de Allah, la paz sea con él; asimismo, lo describe como benévolo con los creyentes. Es apropiado entonces para los creyentes alegrarse por esta misericordia regalada y por esta bendición. Dice Allah en su libro: “Di: Que con el favor de Allah y con Su misericordia se regocijen, ello es mejor que cuanto reúnen”. Y dice en otra aleya: “No te hemos enviado sino como una misericordia para los mundos”. Allah lo envió a toda la nación como anunciador de buenas noticias y advertidor. Buenas nuevas para aquellos que respondieron a su llamada y siguieron su Sunnah, y advertidor para los arrogantes que se apartaron de su religión y su libro.

Musulmanes, musulmanas, la conmemoración significa acordarse de algo tras transcurrir días y años; cuando se trata del Mensajero de Allah, sala lahu alaihi wa salam, sin embargo, no es el caso, porque lo recordamos constantemente, noche y día. Lo nombramos en nuestros dhikr y en nuestras oraciones, rezamos por él continuamente y lo mencionamos en el adhan, el iqámah y en el tashahhud en cada salat. El recuerdo del Profeta, la paz sea con él, está asociado con la llave del yannah: La ilaha il·la Allah, Muhammad rasulullah. Conmemorar su nacimiento es para que nos aferremos a su Sunnah y mencionemos sus modales, sus características, y para que sea conocido por nuestros hijos e hijas. La vida de este noble Profeta merece ser estudiada en todo momento, en cualquier tiempo y lugar, porque Allah, Todopoderoso, juró por ella en el Corán debido a su alto rango y la grandeza de su estatus, dijo: “¡Por tu vida! que estaban perdidos en su ceguera”. En estudiar su vida, hay luz que nos ilumina en lo bueno y en lo malo. En su Sunnah, hay un remedio para todo corazón enfermo y cualquier enfermedad. Es un modelo a seguir para todas las personas. Un ejemplo para los ricos: en su generosidad no hay miedo a la pobreza, de igual modo, es un ejemplo para los pobres. Murió y su escudo fue hipotecado a un judío con un saa (una medida) de cebada. Aisha nos cuenta: “Pasaba un mes o dos, sin encenderse fuego en la casa del Mensajero de Allah. Me preguntaron, ¿qué comíais entonces?  Dijo, los dos negros: dátiles y agua”.

El profeta, la paz sea con él, fue un modelo a seguir para el huérfano, Él, sala alahu alaihi wa sallam probó todo tipo de orfandad. Del mismo modo, es un modelo a seguir para los desterrados ya que fue expulsado de su ciudad natal. Igualmente, es un ejemplo para aquellos afectados por enfermedades, muerte, pérdida de familiares, seres queridos, hijos y parejas. Dice Allah: “Realmente en el Mensajero tenéis un hermoso ejemplo”.

Creyentes habéis de saber que Allah selló con el mensaje de nuestro Profeta las demás revelaciones. Recitando este mensaje, los corazones y las almas se mantienen vivos; por ello, la revelación lo denominó: Ruh. Dice Allah, alabado sea: “Asimismo te hemos inspirado un espíritu que viene de Nuestra orden”. No hay vida sin el Corán, y no hay vida sino con la Sunnah del mejor de los Mensajeros. Cualquiera que se desvíe del camino está inevitablemente muerto. El nacimiento del Mensajero de Allah es una ocasión para alimentarnos de su amor y agarrarnos a su Sunnah. En el Corán dice Allah, alabado sea “Di: Si amáis a Allah, seguidme, que Allah os amará y perdonará vuestras faltas. Allah es Perdonador y Compasivo”.

Sabed que la conmemoración de su nacimiento la paz sea con él, no es la recitación de poemas que lo alaban, ni entusiasmarse al escucharlos o cabecear al cantarlos. Más bien, el significado de celebrar la noche del Mawlid es que midas tus modales con el termómetro de su sunnah y en qué nivel está ¿De verdad perteneces a sus seguidores? ¿Eres de su nación con tus acciones, con tu moral y con tu adoración? O simplemente reclamas con tu lengua seguir su sunnah pero actúas de manera diferente. ¿Te llevará esta ocasión a revivir su sunnah de nuevo? ¿Actuaremos educadamente con él, sala lahu alaihi wa salam, dejando lo que él prohibió de los vicios? ¿Cumpliremos con lo que nos mandó de las virtudes? “Y lo que os ha dado el Mensajero tomadlo, pero lo que os prohíba dejadlo”. ¿O pasaremos la noche de su nacimiento comiendo, bebiendo y recitando poemas con nuestra lengua y contradiciendo su sunnah con nuestras acciones? Nuestros jóvenes no se mantendrán en el camino a menos que comprendan la Sunnah y el mensaje revelado. La familia no tiene ningún peso sin los modales del Mensajero de Allah, la paz sea con él. Además, lo único que despertará a los jóvenes es volver hacia Allah inmediatamente arrepentidos y regresar a la sunnah del Mensajero sala lahu alaihi wa salam.

La Sira del Mensajero de Allah es una medicina para todo corazón enfermo y una cura para toda persona negligente. Allah, subhanahu wa ta´ala, inspiró a los objetos, los animales y las plantas su profecía y su amor, y ha hecho que se distraigan los corazones de los perdedores de Su din. Las piedras y los árboles saludaban al profeta, la paz sea con él. El tronco de la palmera sobre el que se apoyaba para los jutbas lo añoró y, cuando le hicieron el púlpito, lloró por su separación y no se calmó hasta después de abrazarlo y confortarlo. La araña lo protegió con su tejido durante su hiyra como apoyo de Allah, Él, alabado sea, dice en su libro: “le ayudó con ejércitos que no veíais”. Creyentes, aferraos a la Sunnah de vuestro Profeta, la paz sea con él. Y seguidlo, tal vez seáis guiados. “Quien obedece a Allah y a Su mensajero ha triunfado con gran éxito”.

Oh Allah, ayúdanos a seguir su Sunnah, concédenos su intercesión, que muramos siguiendo su camino y que estemos el Día del Juicio bajo su estandarte.