Alhamdulillah, Quien Creó y Dio provisión, Decretó y Guio, hizo a unos felices y a otros miserables. Él extravía y guía con Su sabiduría, y da y quita a quien quiere.
Doy testimonio de que no hay más Dios que Allah, Único sin parecido, y doy testimonio de que nuestro Maestro Muhammad ﷺ es Su siervo y mensajero, el imam de los primeros y los últimos y el líder de los compasivos, y Paz y bendiciones sobre su familia y a quienes los siguen hasta el Día de Juicio.
¡Musulmanes!, tened taqwah de Allah, y adorad a vuestro Señor con corazones puros y sanos, libres de rencor, odio y malos hábitos.
Sabed que Allah, Alabado sea, ha unido los corazones de Sus siervos creyentes tal como lo dice la aleya: «Aunque hubieras gastado todo cuanto hay en la tierra no habrías conseguido unir sus corazones, sin embargo, Allah los unió. Verdaderamente, Él es Irresistible, Sabio». (Sura de los botines de guerra, 63)
Así que, que nadie altere esta armonía, que no alteren este amor con odio, malicia y animosidad que nuestro Señor nos prohibió en Su Libro y nuestro Profeta ﷺ en sus hadices. Dice Allah, Alabado sea, en Su libro: «Los creyentes son, en realidad, hermanos; reconciliad pues a vuestros hermanos y temed a Allah para que se os pueda dar misericordia». La aleya termina con la palabra misericordia porque el odio impide que exista la misericordia entre los que están en disputa. La aleya significa: «Evitad las disputas y los conflictos, tal vez vuestro Señor tenga misericordia de vosotros». Muslim narró en su Sahih que el Profeta ﷺ dijo: «¡No os odiéis, ni envidiéis, ni os neguéis unos a otros, sed siervos de Allah y hermanos!».
Esto es lo que nos pidió el Mensajero ﷺ a toda su ummah. Nos ordenó ser hermanos y nos prohibió todo lo que fuera una amenaza para los fundamentos de la hermandad, como la envidia, el rencor y el odio, ya sea entre individuos, comunidades o las diferentes escuelas. También entre las parejas, o entre una persona y sus hijos. Y dijo en otro hadiz: «No le está permitido al musulmán separarse de su hermano e interrumpir sus vínculos más de tres noches, llegando a que cuando se encuentran, cada uno aparta la cara del otro. El mejor de los dos será el que primero pronuncie el Salam». Si los dos disputantes son parientes, entonces la falta se duplica. Porque combina la ruptura y el abandono de su familiar. ¿Dónde está el perdón que nuestro din nos ha ordenado practicar? Allah, Alabado sea, nos dice: «Te preguntan, qué deben gastar. Di: el perdón».
No te prives del bien de la reconciliación. ¡Date prisa, musulmán!, y Sé de los primeros en hacer las paces. Derrota al shaitán que está infundiendo su veneno en ti, y se interpone en tu camino hacia el bien. «Es cierto que el Shaytán siembra discordia entre ellos; realmente el Shaytán es un enemigo declarado del hombre». (Corán, 17:53)
Creyentes, estamos en Shaban, el mes de la bondad y las bendiciones, el mes de la tolerancia, el mes de la reconciliación y el mes de olvidar todas las diferencias que ocurren entre las personas. En el mes de Shaban, el perdón de Allah abarca a todos sus siervos, los del este y los del oeste, los del sur y los del norte, excepto a dos categorías. Así que, ¡musulmán, musulmana!, no estés entre ellas, porque este perdón no las incluye. están lejos de la misericordia de Allah que todo lo abarca excepto a ellos. ¿Quiénes son estos que estarán entre los Perdedores? Dijo el Profeta ﷺ: «Allah mira a su creación en la noche del 15 de Shaban, y perdona a todos sus siervos, excepto a los idolatras y a quienes abrigan odio contra los creyentes». Así que aléjate del shirk y del odio, y la Misericordia y el perdón de Allah te rodearán, y tu corazón estará libre de enemistad, será purificado, y tu interior se tornará luminoso. Así toda el alma será purificada. Extiende tu mano a cualquiera con quien hayas tenido enemistad, malentendido o discusión y salúdalo con el salam, y dale la mano. ¡Siervos suyos! Entre las razones que fortalecen los lazos de amor y hermandad se encuentra la sonrisa. Dice el Profeta ﷺ: «Sonreír frente a tu hermano es sadaqa» Asimismo, están las buenas palabras. Dice Allah Todopoderoso: «Y hablad a la gente de buena manera». Dijo también: «Di a Mis siervos que hablen con las mejores palabras, porque es cierto que el shaytán siembra discordia entre ellos». (Corán, 17:53) Esto incluye escuchar a tu hermano y no interrumpirlo.
Dijo sayyiduna Umar, que Allah esté complacido con él: «Tres cosas fortalecen la hermandad: saludar a tu hermano cuando lo encuentras, elegirle el mejor sitio en las reuniones y llamarle por sus nombres más queridos».
Así que nuestro Señor nos prohibió llamarnos unos a otros por apodos. Dice Allah, Alabado Sea: «(…) ni os insultéis con apodos. Malo es dar un nombre de perversión después de ser creyente».
Allahumah, bendícenos en Shaban y permítenos llegar a Ramadán, protégenos del odio, de la enemistad y de los malos hábitos, purifica nuestros corazones, corrige nuestras intenciones, concédenos victoria sobre shaitán, fortalece nuestra fe, ilumina nuestros corazones, no hagas de este mundo nuestra mayor preocupación, ni la meta de nuestros deseos, y corrige nuestras diferencias a través del perdón y la tolerancia, porque Tú eres el Perdonador y amas el perdón, así que perdónanos. Amin.