Musulmanes, tened Taqwa de Allah, y adoradlo en secreto y en público, arrepentíos ante Él para que tengáis éxito.
Dijo Allah, Alabado Sea: «A Él asciende la buena palabra, y la buena acción la eleva».
Musulmanes, la buena palabra (al kalima attayyiba) demuestra el valor del hombre, ya que revela lo que oculta su conciencia, su corazón y su pecho, como por ejemplo el odio, la ignorancia, la hipocresía o el imam. Esta misma palabra demuestre la pureza de su corazón y la solidez de su mente. Por ello dijo el Profeta ﷺ: «Quien crea en Allah y en el Último Día, que diga el bien o permanezca en silencio». Se ha dicho que el hombre está escondido debajo de su lengua.
Siervos de Allah, la buena palabra es una ganancia, y la mala palabra es una pérdida. Y Allah, Alabado Sea, puso un ejemplo para ambas en el Corán diciendo:
«Acaso no ves cómo Allah compara la buena palabra con un árbol bueno cuya raíz es firme y cuyas ramas están en el cielo? Da su fruto en cada época con permiso de su Señor. Allah pone ejemplos a los hombres para que así recuerden. Pero una mala palabra se parece a un árbol malo que está desenraizado sobre la tierra, sin estabilidad».
Creyentes, una buena palabra lleva en sí el bien, y el ser humano será recompensado por ella; y la mala palabra tiene como resultado el mal, la obscenidad y la indecencia. El que la pronuncia no cosecha sino malas obras. Para la gente del Tafsir la buena palabra es la ilaha Ila Lah, y no la iguala ninguna palabra. El Profeta ﷺ dijo: «Lo mejor que he dicho yo y los profetas anteriores es la ilaha Ila Lah. Es la llave del Jardín, y la salida de la oscuridad del kufr a la luz del Islam y la Sunnah. A través de esta palabra limpias tu corazón del shirk, y con ella sales de la ignorancia al conocimiento. Es aquella cuya raíz es firme y cuya rama está en el cielo. Por ello, la encuentras en todos los rituales del Islam. En el adhan, en el iqama, en el salat, etc.
Una buena palabra es toda palabra que trae buenas nuevas, consejos o felicidad , por la cual alivias el dolor de tu hermano, o por la cual alivias el corazón de una persona confundida y perdida. O alertas o enseñas a cada ignorante. Todo esto se considera como kalima tayyiba, que Allah eleva tal como dijo: «A él asciende la buena palabra, y la obra justa la exaltará».
La palabra buena es el pilar del Da’wah. Es por eso que el Profeta ﷺ la contó como sadaqah y dijo: «protegeos del fuego, aunque sea con medio dátil, y si no podéis, entonces con una buena palabra». Una buena palabra es aquella que se disfruta con los sentidos y no abruma la naturaleza humana o el sentido común. Dar sadaqah y hablar con buenas palabras son similares, pues ambos traen alegría al corazón. Más bien, es más útil que el dinero porque el dinero se acaba. Y el Todopoderoso dijo: «Una palabra conveniente y perdón, es mejor que una limosna acompañada de agravio. Allah es Rico e Indulgente».
Y con la buena palabra el Profeta Muhammad ﷺ transmitió el mensaje, y con él abrió los corazones oscurecidos por la ignorancia. Allah, alabado, sea dijo: «Por una misericordia de Allah, fuiste suave con ellos; si hubieras sido áspero, de corazón duro, se habrían alejado de tu alrededor». Y dijo a Musa y Harun, cuando los envió al Faraón el tirano: «Y habladle de manera suave, tal vez recapacite y se guarde». Siervos de Allah, la esencia del Islam es el buen trato, ya sea con dichos o con hechos. Dijo Allah, alabado sea: «y hablad de buena manera a la gente». Y dijo el Profeta ﷺ: «El musulmán es aquel de cuya lengua y mano los musulmanes están a salvo».
Empezó con la lengua porque duele más que la mano. Se ha dicho que las cicatrices de la lengua se curan… Pero no se cura lo que hiere la lengua.
Pesa tus palabras, creyente, antes de pronunciarlas. Si son buenas, pronúncialas, y si son malas, mantente en silencio. Se ha dicho: «si el habla es de plata, el silencio es de oro». Y no hables sino lo que te complacería ver en un libro que lo registra todo.
Allahummah, protege nuestras lenguas de toda blasfemia, obscenidad y maldad. Guía nuestras palabras y acciones. Protege nuestros miembros de todo vicio. Embellece nuestras palabras, y haznos de los que escuchan los discursos y siguen lo mejor de ello. Amin