Alhamdulillah, Quien guía al imán a quien Él quiere y hace que los fieles amen el Corán y la Sunnah y que sean de la gente del İhsan, y les hace odiar la inmoralidad y la desobediencia
Musulmanes, tened taqwah de Allah en secreto y en público y en cualquier momento y lugar. Sabed que la Purificación de los corazones es una de las características de los siervos de Allah piadosos y sinceros. Abdullah bin ‘Umar, que Allah esté complacido con ambos, narró que se le preguntó al Mensajero de Allah ﷺ: «¿qué gente es mejor». Él dijo: «Todo el que tiene el corazón majmum (limpio) y es sincero en lo que dice». Dijeron: «Sabemos qué es sincero, pero, ¿qué es el corazón majmum?». Él dijo: «Es el corazón puro, piadoso, sin falta, sin transgresión, sin engaño ni envidia». (Narrado por Ibn Mayah). Y A-lah, Todopoderoso, dijo: «Quienquiera que Allah guie, abre su corazón al Islam y a quien quiera desviarlo, le hará el pecho estrecho y torpe, como si ascendiera al cielo». Los salaf competían en proteger los corazones de la hipocresía, el odio, el racismo, el desprecio y la discriminación, ya que a través de los corazones sanos se consiguen miembros sanos y obedientes. El pecho es el receptáculo del corazón y es el lugar que mira el Todopoderoso. Dijo el Profeta ﷺ: «Allah no mira vuestros cuerpos ni vuestra apariencia, sino que mira vuestros corazones y vuestras obras». En este hadiz se manifiesta la necesidad de prestar atención a purificar los corazones, porque el corazón es el lugar de la intención y es el emir de los miembros. Dice el Mensajero ﷺ: «Los actos dependen de las intenciones y cada uno será recompensado por su intención, en el cuerpo hay un trozo de carne que, si es bueno, todo el cuerpo es bueno, y sin embargo si es corrupto, todo el cuerpo está corrupto, y ese (trozo de carne) es el corazón».
Siervos de Allah, sabed que el corazón sano salva en el Día de juicio. Allah Todopoderoso dijo: «El día en que ni las riquezas ni los hijos beneficiarán excepto aquel que se acerca a Allah con un corazón sano». Ibn al-Qayyim dijo: «El corazón sano es aquel que está libre de las aflicciones y enfermedades que afectan los corazones». Se le preguntó a Ibn Sirin: «¿Qué es un corazón sano?». Él dijo: «Es el corazón libre de engaño y de envidia». Y dijo el Profeta ﷺ: «El imán y la envidia no coexisten en el corazón del siervo».
El corazón sano es una de las características de la gente del Yannah. Allah, alabado sea, dijo: «Y les quitamos el odio que había en sus pechos, hermanos están en lechos uno frente al otro, en los que ninguna calamidad los tocará, y no serán expulsados de ella». Nuestro ﷺ solía pedir a Allah un corazón sano y una lengua honesta. Y él solía decir: «y quita la sajima de mi corazón» es decir aleja de mi corazón los rencores, el odio, la malicia, la envidia y el engaño. Y dice Allah en el Corán: «y los que vinieron detrás de ellos dicen: “Señor nuestro, perdónanos a nosotros y a nuestros hermanos que nos precedieron en la fe, y no pongas en nuestros corazones ningún odio hacia los que creen, en verdad, Tú eres bondadoso y misericordioso”».
Uno de los medios para conseguir un corazón sano es querer el bien para los demás. Dijo el Profeta ﷺ: «Ninguno de vosotros creerá hasta que ame para su hermano lo que ama para sí mismo». Asimismo, uno de los medios para conseguir un corazón sano y limpio de enfermedades es el ayuno. A través del ayuno, las almas se abren al perdón y a la paz del corazón. Dijo el Profeta ﷺ: «Ayunar durante el mes de la paciencia (Ramadán)y tres días de cada mes curarán las enfermedades del corazón».
De igual modo lo que purifica el interior de cada uno es el libro de Allah: recitarlo, memorizarlo, contemplarlo y buscar su interpretación. Dijo Allah, alabado sea: «Oh gente, os ha llegado a vosotros una amonestación de vuestro Señor y una cura para lo que hay en los pechos, una guía y una misericordia para los creyentes».
Creyentes, una de las cosas que limpia el corazón es estudiar las vidas de los justos entre los Salaf. La pureza y serenidad del corazón esa era su característica. A Abu Ad-Dujana le preguntaron cuando estaba enfermo «¿Por qué tu cara es tan alegre?». Dijo: «No hablo de lo que no me concierne y mi corazón es sano hacia los musulmanes». Los predecesores solían obrar poco y su recompensa era inmensa gracias a sus corazones puros.
Allahumah, purifica nuestros corazones de malicia, envidia y calumnia, y corrige nuestras intenciones, y purifica nuestro corazón de todo lo que nos aleja de tu amor. Y purifica nuestras almas de los susurros del shaitan. Allahumah haz que amemos el Corán y que odiemos la incredulidad, la inmoralidad y la desobediencia. Allahumah, suaviza nuestros corazones con la recitación de Tu Libro y concédenos la dulzura del Corán, la intercesión del Corán y la contemplación del Corán, en el día y la noche. Y concédeles victoria, ya Allah, a los oprimidos dondequiera que estén, cura a sus heridos y enfermos, alimenta a los hambrientos y derrota a los agresores opresores. Allahumah, ante Ti nos quejamos de la debilidad de nuestra fuerza, y nuestros pocos medios y el desprecio de la gente. Amin.