Alhamdulillah, Quien nos ha bendecido con innumerables favores. Y nos Ordenó agradecerle, en secreto y en público, y dijo: «Y habla del favor que tu Señor te ha dado».
Sabed que estáis en el mejor de los tiempos. Por tanto, esforzaos haciendo buenas obras para entrar al Firdaus. Estamos en los días del Hayy, el ayuno, el sacrificio y del dar sadaqa. Son días en los que se multiplica la recompensa, y Allah multiplica a quien Él Quiere. Entre los más grandes de estos días está el Día del Sacrificio, el día de Eid al-Adha. Dice Allah, Alabado sea: «Así que reza a tu Señor y sacrifica». En esta Aleya se ha relacionado el sacrificio con la oración, debido al alto estatus que tiene ante Allah. Asimismo, el sacrificio es uno de los actos de adoración del islam, y quien sea reverente con los actos de adoración de Allah… ello es parte de la taqwa de los corazones. Y Allah lo ha ordenado para revivir la creencia de nuestro padre Ibrahim y revivir la sunnah de nuestro Profeta ﷺ. Se ha narrado que Abu Hurairah, que Allah esté complacido con él, dijo: «El Mensajero de Allah ﷺ dijo: “El que es capaz de sacrificar y no sacrifica, que no se acerque a nuestro lugar de oración”». Este hadiz indica que el sacrificio es una sunnah confirmada en el madhhab maliki, y entre la gente del conocimiento hay quienes dijeron que es obligatoria.
Musulmanes, aquellos que son capaces de sacrificar han de seguir sacrificando, ya que es una sunnah importante y una ofrenda para acercarse a Allah, quien dijo: «Reza a tu Señor y sacrifica», y quien abandona esta sunnah teniendo la capacidad de hacerla, ha abandonado la sunnah de nuestro Profeta ﷺ.
Respecto al beneficio del sacrificio hay varias aleyas en el Corán, y hadices, que lo demuestran. Dijo el Profeta ﷺ: «No hay una obra más querida por Allah que el derramamiento de sangre en el Día del Sacrificio, y que en el Día de la Resurrección será traída la ofrenda con su cuernos y cabellos diciendo: “Entonces alegraos con ello”». Y Allah, Alabado Sea, dijo: «Ni su sangre ni su carne ascienden a Allah, lo que llega a Allah es vuestro temor de Él». En el madhhab maliki el tiempo del nahr (sacrificio) comienza después de la salida del sol, la oración del Eid y el jutba, y después de que sacrifique el imam que dirige la oración y da el jutba, y dura su tiempo hasta la puesta del sol, porque el Profeta ﷺ prohibió el sacrificio por la noche; algunos ulemas lo detestan e Imam Malik lo prohíbe. Y los días de al-Tashriq son días de sacrificio, comer, beber y de recordar a Allah. Y el que va a sacrificar debe mencionar el nombre de Allah, afilar su cuchillo, no torturar el animal, no sacrificarlo frente a otro y no afilar el cuchillo delante de él, porque el Islam ordena la bondad hacia los animales y las plantas y nos insta a tratar amablemente a todo ser viviente.
Creyentes, a la hora de escoger el animal hay que tener en cuenta la edad, no vale menos de seis meses en el caso de las ovejas, y no menos de un año en el caso de las cabras. Y lo preferible es que sea de entre nueve meses y un año en ovinos y más de un año en caprinos.
Creyentes, una de las condiciones del sacrificio es que el animal esté libre de defectos, porque el Profeta ﷺ dijo: «Cuatro cosas no se aceptan en el animal de sacrificio: el ciego, el cojo, el enfermo y el débil». Y quien lo compra libre de defectos, pero luego le ocurre algo, dice la gente de conocimiento que es aceptable. El sacrificio es una ofrenda por la cual el siervo se acerca a su Creador, quien le dijo: «Reza a tu Señor y sacrifica». Pido perdón a Allah por mí, por vosotros, y por todos los musulmanes.
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Siervos de Allah, el sacrificio es un recordatorio del sacrificio de sayiduna Ibrahim Jalil ar-Rahman, la paz sea con él, a quien Allah lo puso en prueba con el sacrificio de su hijo Ismail, la paz sea con él. Cuando le dijo a su hijo: «¡Hijo mío!, he visto en sueños que te sacrificaba, considera tu parecer». Esta es una gran prueba tal como la llama el Corán. «Esta es una prueba evidente». Y su hijo Ismail, respondió inmediatamente: «¡Padre!, haz lo que se te ordena y si Allah quiere, encontrarás en mí a uno de los pacientes». Ibrahim, la Paz sea con él, fue a implementar el mandato de Allah con determinación y voluntad y Allah lo redimió con una gran ofrenda. Y dijo: «Ibrahim!, ya has confirmado la visión que tuviste. Realmente así es como recompensamos a los que hacen el bien». Allah dio testimonio de la sinceridad y determinación de Ibraham, ¿cómo no iba a ser así, cuando lo contó entre los mensajeros llamados Uli-l Azm?
El shaitan trató de susurrarle apareciendo en la forma de un viejo para darle consejo. Esto ocurrió en Mina, donde ahora los peregrinos lapidan el shaitan los días del tashriq siguiendo la sunnah de Ibrahim, la Paz sea con él. Este suceso es el origen del yamarat.
Dice Allah, Alabado sea: «¿Y quién, sino aquel que se rebaja a sí mismo, puede rechazar la religión de Ibrahim?».
Toda la vida de este noble Profeta fue lucha, trabajo, determinación, paciencia y certeza.
Musulmanes, debemos aferrarnos al din de nuestro padre Ibrahim y a la sunnah de nuestro Profeta ﷺ.
Allahummah, haznos firmes en tu din y en la sunnah de tu Profeta ﷺ y acepta nuestras obras. En verdad Eres Atawwab Arrahim. Amin